CIGARRAS

LAS CIGARRAS CANTARON DE NOCHE Y DE DÍA

En la Campiña de Córdoba hizo ayer tanto calor que las cigarras no dejaron de cantar en todo el día después de cantar toda la noche- informa el agente de medio ambiente Manuel Córdoba- y ni siquiera con la aurora se callaron las cigarras. Las cigarras son conocidas como “chicharras” por el ruido que producen, pero las auténticas “chicharras” son saltamontes- es decir, Ortópteros- y las cigarras pertenecen al orden de los Hemípteros y, en concreto, ésta que se escucha en los olivares cordobeses es una cigarra llamada Cicada orni.

No son fáciles de ver las cigarras, tienen el color de las cortezas. Y son pequeñas – de 2 a 4 centímetros de largo- y de alas grandes, membranosas, que pliegan como si unas alas transparentes pudieran dar sombra al abdomen. Vuelan muy poco. Con las púas de sus patas se sujetan días enteros a su árbol favorito: hay cigarras que prefieren el jugo vegetal del pino, otras el del avellano, y Cicada orni, el de los olivos.

Cantan mucho, y el chirrido que parece continuo está lleno de frases solapadas. Es el sonido del calor, el del triángulo del fuego: calor, oxígeno y combustible. El oxígeno lo trae el viento, y el combustible es el campo agostado. Calor, oxígeno y combustible. Las cigarras cantan, de noche y de día, como si presintieran el fuego y así pudieran evitar que se quemara su árbol preferido.

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