Montmartre

Os escribo desde mi habitación en Montmartre con estos preciosos geranios hiedra en la ventana.

No tienen sus flores mi color preferido ni son las plantas que más me gustan para una ventana y sin embargo hay lugares donde quedan de maravilla como en Córdoba o en París, siendo ciudades tan distintas.

Me encanta este barrio donde vivo estos días. Bajar a desayunar al café, encontrarnos con nuestro hijo yendo al trabajo; ir a la “Laverie” con un libro de Flaubert para leer mientras da vueltas la secadora, o levantar la vista para observar en silencio la gente que pasa o que está quieta como el florista observando un adorno que ha compuesto quitando y poniendo ramas toda la tarde, una mujer que camina con tacones leyendo un libro que lleva abierto en una mano, una chica rubia con el pelo largo hasta la cintura, liso y cortado como una tabla, asomando por el casco mientras conduce una scooter que hace un ruido peculiar, como de carro, sobre los viejos adoquines.

Por un momento me pregunto si no serán figurantes, personajes de un cuadro o una película.

No puede ser verdad tanto arte en las cosas y en las personas con tal naturalidad, me digo.

Pero son de verdad, como los geranios de mi ventana.
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Buenos días desde París queridos lectores de la Naturaleza,

Mónica #aceytuno
Cartas desde París

Ventana de Montmartre / Agosto 2018 / Aceytuno