Otros años, las violetas empezaban a florecer cuando las ramas de los robles ya tenían hojas
Ha amanecido todo escarchado. De lejos, porque aún no he bajado a verlas, están los sombreros de las Amanitas muscarias rojas, como planetas lejanos, entre un cielo oscuro de hojas. Dicen que se llaman así estas setas porque las moscas
pierden el conocimiento cuando se posan en ellas. En pocos días, habrán desaparecido estas setas por el frío y la falta de agua, dejando en el suelo sus esporas para el año que viene. Tengo que bajar a ver sí, también a su alrededor, hay moscas desmayadas.
Hasta mañana,
Mónica Fernández-Aceytuno
NULL