En el otoño, los cálices de un rojo intenso destacan entre verdes mortecinos y ocres dorados.
María Luisa
María Luisa
Hasta las raíces principales, han quedado al aire, como esta rojiza de una tuya derribada por el viento, mientras las raíces de finísimos capilares siguen empeñadas en sostener, ahora en vertical, la tierra.
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Hasta las raíces principales han quedado al aire, como esta rojiza de una tuya derribada por el viento, mientras las raíces de finísimos capilares siguen empeñadas en sostener, ahora en vertical, la tierra.