Querida Mónica, en este ventoso fin de semana, he dedicado la tarde a hacer pastas con mi hija y mis nietos y, mientras el horno nos regalaba con ráfagas de aromas, hemos asistido a un precioso anochecer y a la salida de la luna, que, ajena al

Cuando todo se acaba, vuelve a empezar de nuevo.
Cuando todo se acaba, vuelve a empezar de nuevo.
Y con esta primera rama florecida, la última de 2008,la primera de 2009, del ciruelo japonés,les deseo FELIZ AÑO NUEVO.
Mónica Fernández-Aceytuno
NULL
Cuando todo se acaba, vuelve a empezar de nuevo.