Lo que más se ve de un gobio son los ojos.

Mónica Fernández-Aceytuno

Lo que más se ve de un gobio son los ojos.

Mónica Fernández-Aceytuno

Este pez diminuto de grandes aletas pectorales, con forma de oreja de elefante, y estampado como el de un lagarto, es un gobio.

Lo he sabido gracias a la participación de Alex y ahora sólo nos queda precisar de qué especie se trata pero, teniendo en cuenta que estaba en la costa gallega, quizás sea un Gobius paganellus.

Es precisamente en estas rocas que cubre y descubre la marea, donde hace este gobio su nido, que consiste en una concha, puesta por el lado cóncavo, donde adhiere, como al fondo de una cuchara, por medio de filamentos que se pegan, unos huevos con forma de raqueta en los que se transparentan, en la parte alta, los ojos de las larvas. En realidad, son los ojos lo que más se ve de un gobio.

Los gobios, también depositan los huevos sobre las piedras o los fucus que hay en las rocas donde anida, pero en cualquier caso siempre habrá un grupo de machos defendiendo la puesta.

Me pregunto si era eso lo que hacían tantos gobios juntos mientras yo les sacaba fotos. Espero no haber molestado de más.

Ni siquiera en el mar, no hay que irse muy lejos para ver ¡tantas cosas!

Buen día,

Mónica

FOTO: Gobio (Gobius sp.) el 8-8-2013

AUTORA:Mónica Fernández-Aceytuno

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