Ejemplar de Macaón británica sobre una roca en lo más alto del Monte de Santa Tecla.
Pilar López de Ávila
Pilar López de Ávila
Querida Mónica:
Te adjunto una fotografía del conjunto dunar de una playa gallega cuyo restablecimiento se inició hace pocos años. Quizás te llame la atención la alta presencia de miscantos, una planta introducida como ornamental en nuestros jardines y que está extendiéndose con rapidez por nuestros montes y eriales. Su uso en medianas de autopistas y autovías favorece extraordinariamente su expansión, especialmente en el norte de España.
La filosofía que ha llevado a ayuntamientos y grupos conservacionistas a acotar espacios en las playas para favorecer el restablecimiento de las dunas es muy clara: Por un lado se pretende recuperar la biodiversidad de especies autóctonas en vías de desaparición y por otro lado se intenta controlar la proliferación de especies invasoras. Teóricamente, el propósito es impecable. En la práctica, en cambio, es de muy difícil ejecución. Intentaré repetir la foto en próximos años desde el mismo punto. El cambio puede ser asombroso hasta el punto de que los miscantos podrían invadir el cañaveral (¿otra planta invasora?) que se ve al fondo.
Yo no tengo nada clara la postura que debemos adoptar en relación con las plantas invasoras. Un ejemplo lo tenemos en el eucalito, que ha encontrado en Galicia un habitat para su desarrollo mucho más favorable que el que tenía en sus zonas de origen y que supone en nuestros montes una importante fuente de rentas y de empleo. No me atrevería yo a demonizarlo repitiendo mensajes catastrofistas que denuncian su papel como gran consumidor de agua, cuando parece que el pino autóctono necesita mucha más agua (y por supuesto mucho más tiempo) que el eucalito para elaborar un metro cúbico de madera. Habrá que impedir la proliferación de plantas invasoras cuando supongan un retroceso en la producción o en el medio ambiente pero habrá que aceptarlas cuando nos aporten beneficios. ¿Puede alguien oponerse a que se cultive la patata o el maíz con el pretexto de que no son plantas autóctonas?
Lo mismo pienso de los cultivos transgénicos que, en mi opinión, de una forma poco razonada, son rechazados por tanta gente, cuando los controles a que deben someterse para ser autorizados son rigurosísimos. Un agrónomo que trabaja en este campo me comentaba hace meses que nunca hubieran sido autorizadas si fueran transgénicas, por su contenido en histaminas, la mayor parte de las variedades de uva blanca para vinificación cultivadas desde tiempo inmemorial. Con mayor razón, pienso lo mismo de los cisgénicos.
Un abrazo fuerte, esperando de los lectores del tablón que me aclaren, especialmente llevándome la contraria, las dudas que tengo sobre las especies invasoras. Joaquín