No se puede vivir sin dormir,
y probablemente tampoco se puede vivir sin soñar.
Feliz Día Mundial del Medio Ambiente.
Un fuerte abrazo para todos,
Mónica

Este artículo lo ha escrito
Post relacionados
Os escribo desde la hermosísima localidad de Baeza, en Jaén,…
Ayer conocí al maestro botánico Wolfredo Wildpret, Premio Brote Canarias…
Hay unas setas en Galicia que amanecieron ayer con el…