8:23 Los robles americanos, que tienen las hojas más grandes que las del roble carvallo, se doblan tanto con el peso del agua de la lluvia, que el árbol se vuelve rojo, como si hubiera llegado el otoño...

En invierno el campo duerme y sueñan las chimeneas.
Mónica Fernández-Aceytuno
Justo tras el rayo de una tímida tormenta, he venido a darme cuenta de que los fringílidos, entre los que había jilgueros, se ponen mirando al viento sobre las ramas, desafiando, en su pequeñez, al temporal que a rachas llega.
En invierno el campo duerme y sueñan las chimeneas.
Buen sábado,
Mónica
Mónica Fernández-Aceytuno